¿Laboratorio Legal?

Empecé a estudiar Derecho y una de las primeras sensaciones fue… ¿por qué es todo tan complejo? El lenguaje, los formalismos y tecnicismos, las materias. Tenía 17 años y no había tenido contacto jamás con el mundo jurídico, por lo que todo era nuevo para mí. Pero poco a poco te vas introduciendo en esa vorágine de leyes, normas, procedimientos, teorías, y al cabo de los años empiezas a ser consciente que eres uno más. Un jurista más, con su lenguaje enrevesado, sus expresiones, su seriedad.

Muchos de mis compañeros de profesión, abogados o juristas, entenderán cualquiera de las siguientes situaciones: te encuentras charlando con amigos y/o familiares y surge en la conversación algún procedimiento judicial mediático, o te formulan alguna consulta. Nosotros empezamos a hablar, y llegado un momento, es inevitable observar cómo el gesto de tu interlocutor va cambiando, y en un momento dado, sabes que ha perdido el hilo de la conversación.

Considero, después de todos estos años, que el Derecho, y los abogados, tenemos que hacernos entender. Llegar a todos los públicos para que puedan comprender de una forma sencilla y cercana supuestos que nos afectan a todos.

De ahí surge la idea del Laboratorio Legal.

Laboratorio, según la segunda acepción de la RAE, es una realidad en la cual se experimenta o se elabora algo.

Pues bien, la intención del Blog es precisamente la de elaborar contenido legal, de fácil aplicación a casos cotidianos, comentando y explicando situaciones que todos podemos experimentar. Contenido con base legal y jurídica, accesible para todos, que sirva como una primera herramienta para conocer qué opciones tenemos, qué derechos nos protegen o qué obligaciones tenemos como ciudadanos.

Espero poder cumplir con este objetivo, y que os sea de interés.

Os animo a comentar las publicaciones semanales del Blog y a proponer temas que os puedan ser de interés conocer para vuestro día a día.